Este libro postula que la institución policial es un universo marcado por la heterogeneidad de sujetos, tareas, destinos y tradiciones. La investigación etnográfica fue realizada entre los años 2011 y 2014 en las dos escuelas de formación inicial –de oficiales y suboficiales y agentes-de la Policía Federal Argentina y en otras dependencias de la misma institución.
Se analizan condiciones, prácticas y trayectorias de los/as policías y de la institución entre las que se encuentra la jerarquía, la opacidad policial, la transmisión de saberes y los quehaceres que definen el trabajo policial para pensar las formas en que se aprende y se enseña a ser policía.
En el análisis de la configuración del trabajo policial se entrecruzan múltiples dimensiones como el valor del tiempo y el espacio en la definición del trabajo, los usos del dinero, las diferencias de género, los lugares de trabajo, la transformación de las emociones, lo que se aprende en el quehacer laboral y el lugar de la muerte en las definiciones de la tarea, de la persona y de la institución.
Finalmente se abordan las trayectorias sociales de policías se dividen entre trayectorias vitales y carreras o trayectorias profesionales que permitió poner el foco en los continuos y permanentes movimientos, cambios, replanteos, crisis y modificaciones de las posiciones de los individuos y las instituciones a lo largo del tiempo.
Las policías suelen ser pensadas como corporaciones o como bloques monolíticos, este libro postula la necesidad de una mirada más próxima que permita conocer relieves, matices y diferencias en el abordaje de estas instituciones.
