La ciudad secular

La ciudad no ha sido, ni es hoy, un mero escenario sobre el cual lo religioso actúa: la religión ha intervenido desde antiguo en la escritura de la historia urbana, otorgándole a la ciudad sus divinidades tutelares, definiendo espacios y sembrándola de edificios y monumentos. Desde la propia fundación de las ciudades coloniales en Argentina, calles y plazas fueron escenarios y a la vez objetos de apropiación religiosa a través de los desplazamientos de las procesiones y la celebración de funerales, de rogativas, de ejecuciones y de otras manifestaciones públicas de piedad o de impartición de justicia. Pero tanto el lugar de la religión en la cultura urbana, como las propias representaciones que la cultura religiosa tuvo sobre la ciudad, no harían sino transformarse a lo largo de la historia. Este libro colectivo se dedica a analizar ese decurso entre el período llamado de la “organización nacional” hasta la década de 1960 en las ciudades de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Santa Rosa (La Pampa), con el convencimiento de que advertir el carácter constitutivo del debate religioso en la esfera pública urbana permite comprender mejor los momentos en los que el conflicto religioso se ubicó en el centro de la escena pública e incidió en las inflexiones centrales de nuestra historia.